Alicia Laorden escribió:
Mi opinión es que se debe respetar el original en la medida de lo posible. Me explico: hay veces que en las versiones originales bromean poniendo ejemplos que aquí no nos dirían nada, bromeando por ejemplo con personajes televisivos que en España no nos son próximos y que por tanto no haría gracia a nadie porque no lo entenderíamos.
En cuanto a que las películas sean dobladas por famosos, pues hay casos y casos. Si el famoso en cuestión conoce mínimamente el trabajo que tiene que realizar, pues no puedo decir nada aunque prefiera que lo realizaran compañeros míos (qué quieres, todos barremos pá casa...) Yo he coincidido con Florentino, por ejemplo, y es un señor que respeta mucho este trabajo porque ya de pequeñito lo admiraba, y he visto como lo toma muy en serio y se deja dirigir, sin ningún ápice de vanidad, al contrario.
Lo mismo que Goma espuma. De otros casos no puedo hablar, puesto que rara vez se coincide con ellos, suelen hacerlo solos.
Hay que empezar a pensar que somos actores, todos, y que lo mismo vendrán ellos de vez en cuando a doblar como nosotros (los llamados dobladores) podremos aparecer en pantalla alguna vez. Creo, insisto, en que el único requisito es hacerlo mínimamente bien.
Yo respeto a los actores que tengan formación actoral que se metan en el doblaje, como Fernando Guillén. Me imagino que Florentino, por otra parte un tío muy simpático, respeta vuestra profesión, pero es una pena que le convoquen sólo por hacer un tipo de doblaje que no tiene que ver con el original.
Y tanto Gomaespuma como Josema Yuste demuestran que saben acoplar su voz a los doblajes, más que estos a ellos.
Pero se ha llegado a un extremo que vaya, vaya...
También sé que es difícil traducir un chiste local y adaptarlo a nuestra manera de pensar, pero queda como fuera de lugar oír al Will Smith de "EL PRÍNCIPE DE BEL-AIR" "imitando" a José María García ó que un caballo de carreras se llamase "Imperioso", para rematarlo escuchando, al final de dicho episodio, la voz imitada de Jesús Gil diciendo: "¿Dónde está mi caballo 'Imperioso', y tal y tal?"
Si hay que modificar el chiste para que se entienda aquí, no lo hagamos aprovechando el éxito coyuntural de un programa de televisión. Que luego pasa el tiempo y cuando nuestros nietos vean la peli, no entenderán ni de la Misa la mitad.
Un saludo,