Ayer vi esta película cuando en principio no pensaba ni pasar cerca de los cines donde la echaban, pues me daba muy mala pinta (tener a una sobrinita de vacaciones en casa obliga a ciertas cosas...).
Pues bien, me lo pasé bomba: es una película excelente, emocionante y divertidísima. Acierta con el punto justo entre la parodia del género "Tigre y dragón" y la coherencia de una historia propia; tiene moraleja pero no moralina y los personajes, empezando por el protagonista, son estupendos. La animación alucina (hacía tiempo desde la última peli de animación infográfica que había visto, después de más de un horror...).
Ahora el doblaje. Florentino Fernández llegaría a estos menesteros, la primera vez, por ser un FAMOSETE, pero su interpretación es ESTUPENDA. Sabe dar muy bien tanto con los tonos de cachondeo gamberrete como con los más intimistas (aunque, claro, borda sobre todo los primeros), y desde luego no chirría al lado de los profesionales, incluso supera a más de uno del reparto (empezando por Gustems, que como siempre hace una interpretación "resonante" del villano, pero poco más). Excelentes, claro, los veteranos Joaquín Díaz y Eduardo Muntada. Repito: mientras veía la película y al personaje protagonista, no pensaba en absoluto en Florentino: estaba metido en el personaje.
Y, para finalizar, me uno a la protesta por el indignante escamoteo del reparto en la versión española, fuera del protagonista. Si en la original aparecen todos los famosos intérpretes del doblaje (Angelina Jolie, Lucy Liu y demás), era de justicia hacer lo mismo aquí, aunque los nombres sólo fueran a sonar a cuatro gatos. Además que los créditos quedan "cojos", porque se nota que en los planos donde el reparto de personajes va desfilando falta el nombre de su intérprete. Cosas como éstas hacen que se les coja manía a los presuntos "advenedizos". Y el trabajo de Florentino Fernández no se merece esto.
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