Ayer leí en el \"20 Minutos\" la contestación que le daba María Jesús Gil a alguien que había escrito una carta \"iluminando\" a los del periódico por un pequeño reportaje que habían hecho sobre el doblaje en la sección \"Formación y empleo\" (si lo queréis leer pinchad
-> aquí <-, página 21, o, si no os entra bien:
-> artículo <- y
-> anexo <-) dos días antes. He buscado esa carta y os pongo las dos por orden:
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(20 minutos, Cartas de los lectores, 20-10-05)
Pocas voces y mucho dinero en eldoblaje
En sus páginas del martes 18, en su suplemento de Formación y empleo y bajo el epígrafe «El oficio de crear voces», dedican unos párrafos a la profesión de actor de doblaje. Bien por intentar ahondar en este mundo misterioso del que no habla nadie. Sólo escuchamos un gran porcentaje de veces las mismas voces en series, películas, anuncios... y siempre son los mismos: Constantino Romero, Ramón Langa... y su banda. Parece que no hay más gente que tenga un buen registro de voz. Pues bien, se han olvidado de comentar «lo que se puede llegar a ganar, el dinero que se puede acumular si uno tiene el don de una buena voz, una buena academia y un buen padrino». Por si no lo saben, se gana mucho, mucho dinero, pero ¡muchísimo! Les aconsejo que se informen. Esto podría orientar a los jóvenes que quisieran tomar este camino. Juan Luis Martín Varona, 50 años.
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(20 minutos Cartas de los lectores, 24-10-05)
Sobre el doblaje
No sé qué pensar sobre la carta de Juan Luis Martín (20-10-05). Ignoro a qué se dedica. Mi ocupación es actriz de doblaje y locutora. No soy una estrella, pero creo que lo hago bien y como de ello desde 1990, fecha de la llegada de las televisiones privadas. Entonces había mucho trabajo, ahora no. Hace falta demanda para que los aspirantes encuentren un hueco, y desde luego bastantes más cualidades que una «buena voz, una buena academia (si es que la hay) y un buen padrino». Cierto es que se gana dinero cuando se dobla a protagonistas y, por supuesto, cuando se interviene en la locución de un spot o de una cuña; y si son pocos los que lo hacen es porque hacerlo bien es muy difícil. Desde luego la mayoría no ganamos «mucho dinero, pero ¡muchísimo!» (como en toda profesión, el abanico es bien amplio) y si Constantino Romero y Ramón Langa lo ganan, o si se han hecho famosos, no es precisamente cuando doblaban, sino cuando dejaron de hacerlo. Chus Gil.
Poco más hay que añadir, la respuesta ha sido más que adecuada, y, desde luego, mucho más iluminadora que la del señor que opina de un tema que, obviamente, desconoce por completo. A él sí que hay que aconsejarle que se informe bien...