Sonix escribió:
La expresividad de los dibujos animados casi siempre son exagerados y poco creíbles con la realidad.
Pero es que la razón de ser del dibujo animado no es ser "creíble con la realidad". Los animales no hablan ni cantan ni montan números musicales. Los leones no conspiran con hienas para derrocar a un rey león. ¡Y eso de un león "rey" de todos los animales! ¿De qué "realidad" hablas? Además, los animales parlantes de Disney no son, en realidad, animales. Son seres humanos con apariencia animal, que piensan, actúan y sienten como seres humanos. Sus rostros, sus gestos, etc. y esto es particularmente cierto en "El rey león" a menudo están diseñados basándose en los actores que les dan voz. Que su expresividad sea exagerada es parte de su atractivo. No se trata de parecerse a la realidad sino de crear una realidad en la que todo es posible.
Es cierto que sólo he visto el trailer. Pero a veces los tres minutos del trailer son suficientes. No hablo de casos como el trailer de "Spiderman Homecoming", que en tres minutos contaba toda, absolutamente toda la historia. Hablo de que con ver el trailer ya queda claro que los animales resultan inexpresivos como palos, y que carecen del menor atractivo. Sigo sin ver cuál es la razón de ser de esta nueva versión salvo ganar dinero (que lo ganará y mucho).
Y que conste que no soy un "fundamentalista" en esta cuestión. No tengo problema en que se hagan nuevas versiones siempre que se aporte algo nuevo. Por ejemplo, "Pete y el dragón", que era nueva versión de una película sin el menor interés y que no estaba mal. O ese "Libro de la selva" de hace unos años que aunque cometiera el mismo error que esta (realismo a toda costa) por otra parte intentaba aportar algo nuevo acercándose al original de Kipling. Una nueva versión de Peter Pan podría llevar a la pantalla todo lo que Disney limó del original por demasiado turbador. Un nuevo "Bambi", aunque probablemente cometería el mismo error de empeñarse en hacer animales hiperrealistas, podría aportar algo nuevo acercándose al original de Felix Salten. En el caso de "Pinocho", lo mismo, con el libro de Collodi.