Uff, entraría al trapo, pero no sé si es bueno meterse en el fuego cruzado.
Bah, me animo. Entiendo ambas partes, pero casi que me decanto por lo que dice Rose, en cuanto a que la serie es demasiado complaciente. Eso yo lo veo principalmente en los personajes en si.
Por un lado tenemos a Leonard, Howard y Raj, que tras ver tres temporadas y luego cansarme de la serie, me iba dando cuenta que tras la aparente carcasa de nerd, son personas/personajes completamente normales. Leonard es el típico buenazo, abnegado y simpático (tipo Ted Mosby), Raj el que siempre tiene la réplica cómica a mano (tipo Chandler, pero dos divisiones por debajo), y Howard el típico tío patético que va buscando a quien ligarse a todas horas (tipo Russell en Reglas de Compromiso). Aparte de los matices que pueda tener cada uno dentro de su estereotipo, a cada uno le añaden la capa geek, que si videojuegos, noche Halo, portátiles, comics, cine friki... Con ellos no han conseguido unos personajes que de verdad lo pasen mal por no entender el mundo más allá de sus obsesiones, salvo alguna contestación suelta aquí y allá. Luego se emborrachan, tienen ligues, van a fiestas... Todo lo que haría un personaje guay de una sitcom cualquiera, pero soltando referencias a Star Wars de vez en cuando. No son frikis que en una convención de comics preguntarían por qué en una toma el caballo del héroe de una serie es americano, y en la siguiente toma es un caballo australiano.
Y luego está Sheldon. Aquí sí que han procurado crear al nerd como estereotipo, no como una fachada de un tipo normal. Sin embargo, en lugar de tratar al personaje como un Frasier, del que nos podamos reir de lo rarito que es, lo han procurado hacer memorable, en casi todo lo que dice o hace. No tengo muy claro si es por ir demasiado lejos, porque por ejemplo, un friki no tiene porque tener trastornos obsesivo compulsivos, que obviamente, se le añade porque siempre son divertidos en la tele. El no pillar la mitad de las cosas que al resto del mundo le parecen obvias está bien, pero no hace falta enmarcarlo en el síndrome de Asperger, es tan sencillo como que, por ejemplo, si a un nerd se le insinúa una tía, o no pillará las indirectas, o no sabrá que hacer. Así que un personaje con el que en principio no deberíamos empatizar, se convierte en el icono de la serie. No hay más que ver la segunda temporada, que podría llamarse El Show del Dr. Sheldon Cooper.
Puede que esté exagerando, pero es la impresión que me ha dado la serie. Lo dice un tipo que se considera bastante equilibrado entre frikismo y ser un tío normal, con algunos amigos del mismo palo, y otros que no evolucionaron de ser unos completos frikis rozando lo antisocial.
Yaiza no me muerdas.
