Woody Allen escribió:
"CACHÉ (ESCONDIDO)", los fantasmas del pasado siempre vuelven
Una de las películas más inquietantes, no sobre si son de esas de terror oriental tan de moda, sino sobre lo que plantea su argumento referente a una crítica social, a comportamientos del ser humano rayanos en la crueldad, la locura ó simplemente por pura estupidez, es, después de la magistral (y tímidamente distribuida en España) "Manderley" de Lars Von Trier, "Caché" del austríaco Michael Haneke, cineasta con gusto por los argumentos con violencia desatada, aunque mostrada de manera fría y distante, con fondo de denuncia social.
Si en "La pianista" nos dejó boquiabiertos con la insuperable interpretación de Isabelle Huppert de una mujer autodestructiva hasta la más terrible paranoia, aquí se contiene más y deja la violencia latente en la mínima expresión, aunque nos la muestra de una manera más sutil.
Un presentador de un programa literario en televisión, un Fernando Sánchez-Dragó a la francesa, Georges (extraordinario Daniel Auteuil), recibe unas cintas de vídeo en las que se ve la casa del barrio del sur de París en donde vive él con su mujer (Juliette Binoche) y su hijo, ó bien aparece él mismo... Al cabo de algún tiempo, llegan a hartarse, a coger miedo, y a denunciar esto a la Policía, pero al no poder ésta hacer nada mientras no haya amenazas de por medio ó agresiones, decide examinar los vídeos y descubre que en uno de ellos se ve una avenida llamada Avenida de Lenin; descubre que esa avenida la hay en un suburbio en las afueras de París, va allá, y encuentra, en una miserable casa, a un viejo conocido de cuando era niño... Más cosas ocurren, que no voy aquí a destriparlas.
La película es una magistral muestra de los miedos, las paranoias, que cada uno tenemos, pero asimismo una denuncia de la hipocresía del mundo civilizado, que olvida los agravios cometidos a alguien años atrás. Eso lo encontramos en cualquier país del mundo. Michael Haneke dijo que la historia la habría podido ambientar igualmente en su país, Austria, durante los años '40. Y yo pienso que en cualquier país...
Daniel Auteuil, justo ganador del Premio del Cine Europeo al Mejor Actor, nos demuestra su talento, actuando sin exagerar nunca; Juliette Binoche, correcta en su papel de sufrida esposa. La película no tiene banda sonora, Haneke nos la muestra así, sin adornos ni suavizar nada, y hace que nos entre el miedo que sienten los protagonistas.
Como Von Trier, Haneke denuncia y muestra lo malo que cualquier ser humano es capaz de hacer a los demás, y que luego se vuelve en su contra.
CACHÉ (ESCONDIDO): * * * * *
Por favor, me podrías aclarar cual es la sorpresa en el plano final? He visto dos veces la peli, una en DVD, y nada, debo ser tonta, pero no se ver nada de especial. (Había oido o leido que nos fijaramos bien en la última escena). Para no destripar nada a nadie, me puedes contestar privadamente? Gracias.