Cool Hand Mike escribió:
La indisponibilidad temporal de Cantolla no tendría que ser un problema grave, pero lo es. Tenéis que asumirlo: no hay voces. No hay NADA para cubrir ciertos perfiles de actor. ¿Quince años sin sembrar nada? Pues eso es lo que se recoje. Nada.
Cool,
La verdad que eres un genio. Te he leído bastantes posts, y eres un genio, te lo tenía que decir...
Yo creo que si no hay más voces-actores para cada papel, es debido a que han influido determinados factores: el paso del tiempo-ya no es necesario un galán clásico por ejemplo o un papel que hace 25 años valía-; las escuelas de doblaje que equivalen a una voz grave a una voz de galán; el cliente por lo mismo de antes; de gente muy buena que no ha doblado mucho, pero para lo que ha doblado ha dado una calidad máxima, por ejemplo Gonzalo Durán, que hace bastante que no se le escucha.
Voy a analizarlo.
Ahora lo que va es la voz de anuncio, la voz que vende el producto, pero ojo, te lo vende nada más y nada menos que George Clooney (no es ninguna crítica a Luis Porcar o Salvador Vidal). Porque ya automáticamente dice un espectador con ganas de comprar: "si esta voz me suena... ¿Qué producto era? Ahh, sí, el no sé qué. Ahora voy a El Corte Inglés y lo compro para mí. Veréis cuántos ligues...". El cliente puede contar con famosestes siempre que les dé la gana a los que que pongan el bolsillo, ¿por qué no? Pero es más económico y fácil contar con los de siempre, pero poniendo voz de anuncio. Ya sea Salvador Vidal, Luis Porcar, Juan Antonio Bernal...
Luego también se piensa, que cuanto más grave sea la voz más bonita es, otro tópico. Cuanto más grave sea una voz en cuestión menos variedad tendrá. Que se salvan unos pocos como Constantino Romero, el mismo Héctor Cantolla, Joan Crosas, Pablo Adán... Luego están los de anuncio, que pueden tener algún que otro papel decente, como Jordi Boixaderas, Juan Carlos Gustems... y toa la peña.
Esto implica a que la gente, que tiene un tono medio normal o curioso, como Eduardo Gutiérrez, Antonio Lara, Albert Mieza... Doblen unos determinados takes, para unos actores determinados. -Si os fijáis, es justo al revés, los que menciono son más versátiles que Boixaderas y cía.-
Luego de que nos hemos mal acostumbrado a una calidad de doblaje bastante floja. Hay determinados actores que yo no los trago, generalmente secundarios de Barcelona que llevan desde los 80, pero que no me gustan como Rafa Calvo, Gonzalo Abril, Gustems, José Javier Serrano... Que a vosotros os pueden gustar, pero a mí no. Me quedo con otros secundarios que son mejores: Antonio Lara, Juan Fernández, Pep Sais, Joan Pera, Luis Posada...
Sigo con los galanes que es lo que más me tira a mí... El último galán, que era galán y joven fue Armando Carreras. Este se fue, vale. Ya no hay más. Claudio Serrano no tiene voz de galán, tiene una voz bastante buena, pero no. Los últimos que quedan son: Salvador Vidal y Luis Porcar. No les vas a poner a estos que doblen a gente de 30 años... Que por poder pueden, pero no es muy normal.
Ya no hay voces de tipos duros, como bien he mencionado antes: no hay interpretación.
También se puede añadir -que muy extrañamente no doblan mucho- son la gente, de que un director puede pensar o cliente: "tal vez a fulanito le puede ir bien este papel... pero no sé, es muy precipitado". A fulanito le dan ese papel y lo borda. Caso Gonzalo Durán.
La huelga del 93 ha hecho mucha pupa al doblaje. Tal que el cliente decide meter las narices en el doblaje, y no dejarle un 100% de libertad al director. Antes el director si hacía algo, lo hacía porque lo consideraba de una manera, ahora el cliente-supervisor-marketing decide a quién poner si a tal o al famosín de turno.
La cosas han cambiado, espero que la nueva generación que está doblando, haga bien las cosas y con calidad. Pero por lo que estoy viendo, la calidad de las voces y matices va de mal a peor.
Un saludo,
Álvaro