Me animo a dar mi opinión a raíz de leer situaciones idénticas a la mía. Sólo para que esas personas sepan que no están sol@s. No quiero levantar polémica, ni discutir, ni hay un interés u objetivo concreto tras mis palabras. El texto es largo, pero si le das una oportunidad y lo interiorizas, verás reflejada la situación de un buen puñado de gente del "sector".
Soy una de las muchas voces de Madrid que no secundan esta huelga. No llevo más de una década en el mundo de la voz. Sin ser un veterano, he visto y hecho lo suficiente como para no considerarme tampoco "nuevo". Creo que no soy ambicioso, nunca pisé ni pisaré a nadie, y en definitiva, tengo un alma que, si no es buena, intenta serlo cada día. Esto lo digo para que quede clara la perspectiva moral por la que me rijo. La verdad, el corazón y el pensamiento propio. En mi andadura en este mundillo, he conocido a personas a las que realmente aprecio, y que considero de mi misma catadura moral, que sí están apoyando esta huelga. A ellos les entiendo y les respeto. Entiendo que no quieren echarse encima a la profesión, en un trabajo en el que son tan importantes los contactos. Y respeto que luchen por trabajar en el doblaje, por pasión o por cualquier otro fin. Pero en mi caso, hablo de "la voz".
Yo quise pertenecer al doblaje, casi desde crío. Nunca tuve familiar ni conocido alguno en este mundo. En cuanto pude, usé mis ahorros para formarme en una escuela de doblaje que realmente se preocupó por mí, viendo mis ganas y aptitudes (mira que es difícil encontrar una así). Nunca me prometieron que este mundillo sería fácil. Lo pasé mal, me ahorraré los detalles. Fui "oyente" durante un tiempo prolongado. Como en varias historias de las que he podido leer aquí, también conseguí pruebas, también me dijeron que era bueno y tampoco sonó mi teléfono. Nunca me importó el dinero, si ganaba mucho o poco. He vivido en sitios de 10 metros cuadrados en unas condiciones que ustedes no creerían, sólo para poder dedicar todo mi tiempo y esfuerzo al doblaje, mientras ganaba cuatro perras... En realidad lo que me importaba y me importa es superarme a mí mismo, únicamente. Sentirme cómodo, rodearme de buenas energías, de gente humilde que disfruta, lo pasa bien y siempre tiene una sonrisa o una buena palabra. Me alejo de la persona que desprende un ego demasiado grande, o que está dispuesta a cualquier cosa para llegar donde quiere, o que predica comentarios despectivos hacia cualquier persona. Sería mentira si dijésemos que el doblaje no está lleno de personas como estas. Por suerte, también hay mucha gente buena. Y por suerte también, mi camino ha ido en torno a gente buena. Gente sin dos caras (o sin una muy dura).
Por eso he dicho que sí a cada estudio que me ha llamado, sin valorar su categoría, ni quién trabajaba allí, ni el tipo de productos que se hacían. ¿Cómo va a decir que no a nada alguien que saca unos pocos cientos de euros (muy pocos) de esta profesión? Eso también se aplica a procesos de huelga. Nunca se sabe la situación que uno tiene en su casa, señores. Y hay gente que realmente necesita el poco dinero que le dan las pocas oportunidades laborales que tiene. Quiero dejar claro también que en los años que llevo, nunca recibí por parte de absolutamente nadie, una invitación para una reunión, unas palabras que me invitaran a unirme a ninguna asociación... Pero lo que sí tenía claro es que no podría formar parte de una asociación de actores de doblaje hasta que no fuese actor de doblaje como tal. Y no es lo que soy, por eso aquello de que trabajo en el "campo de la voz", como mucha gente. De algún modo, para toda la gente joven desengañada con ciertos aspectos de este sector, la puerta del doblaje se cierra y se abren otras como documentales en los que se paga realmente poco, se graban pequeños trabajos desde casa, o finalmente, se ven obligados a compatibilizarlo con otra cosa, porque ya ven que no van a entrar, aunque hayan trabajado estupendamente las pocas veces que el doblaje les dio la oportunidad. Si hubiera recibido buenas palabras de la asociación por parte de una sola persona, o si alguien me lo hubiera explicado detalladamente y sin una carga violenta en sus palabras, no hubiera dudado en unirme.
Seamos honestos, cuando uno no está dispuesto a pasar por el arco de la falsedad y el halago gratuito, se está cerrando puertas. Si uno necesita comer (literalmente), y no puede dejar de trabajar nunca, ni siquiera en huelga, se está cerrando puertas. Si uno acepta que le paguen poco y no se queja por más que le bajen los cuatro duros que cobra, y se apaña con lo que sea, con tal de trabajar en algo que le gusta, se está cerrando puertas. Estos días (y en la breve huelga de hace unos meses) he visto personas en las puertas de los estudios, en actitudes como las descritas por algunas chicas aquí, que puedo jurar, son totalmente ciertas. Fotos con el móvil desde el bar de la esquina, acurrucados, petición de nombre completo a la entrada de cada estudio sin ni siquiera identificarse antes... una agresividad en las formas y una mala energía, que desde luego está lejos de un carácter informativo, y lejos de una asociación a la que te den ganas de pertenecer. No puedo llamar compañeros a esas personas, porque no lo son, ni en lo moral, ni en lo energético, ni en lo económico, puesto que algunos de ellos ganan miles. Tampoco pueden comparar su posición dentro del doblaje, que ya está construida y formada, con alguien que apenas acaba de empezar, como quien dice.
Las personas buenas que conozco pertenecientes a esa asociación, respaldan la huelga por miedo, y eso es así. Saben que o estás con ellos o estás contra ellos. Síguelos o te quedas fuera. Algo a lo que los jóvenes responden... ¿Fuera de qué, si ya estoy fuera? Como si te permitieran entrar sólo por tu trabajo... En ese caso, algunas personas estarían hinchándose a trabajar, porque hay entre los jóvenes algunas personas que traen aire nuevo, frescura y originalidad, sin perder la técnica ni la calidad, y lamentablemente, muchos no están interesados en verlo. Son invisibles para ellos, excepto cuando hay una huelga. Ahí anotamos bien su nombre y no se nos olvida, ¿no?
"Mira bien a quien pisas al subir, porque te lo encontrarás al bajar", me han dicho siempre. ¿Ustedes creen que estar en una asociación facilitaría la "escalada"? ¿No creen en serio que algunos renombrados "protectores del territorio" no se sienten amenazados por jóvenes que llegan con fuerza y con registros similares? ¿No tienen cierto temor a hacerse mayores y a que alguien que no sea su hijo (o familiar próximo) tenga que sustituir su registro? Tal vez deberían. Porque si no se abren, si no cambian sus vibraciones respecto al total de sus compañeros, están prácticamente obligándoles a seguir grabando cuñas por pocos euros en sus casas. ¿Qué creen que harán gran parte de las empresas cuando descubran que hay gente de treinta y tantos cobrando unos pocos euros por su trabajo, y que suena exactamente igual que el actor o actriz de doblaje que le cobra unos cuantos miles? ¿De verdad en estos tiempos alguien cree que es imprescindible, habiendo gente con tantísimas ganas y tan poquísimas oportunidades? ¿De verdad se felicitan entre ustedes cuando el actor o actriz al que han doblado se lleva un Oscar? ¿De verdad hay directores que, si llegan a llamar a gente joven es sólo para divertirse metiéndoles presión o llevándoles al límite con aires de superioridad? Pues sí, de verdad.
Con lo cual, entiendan que somos muchos las personas buenas, normales y corrientes, de pensamiento independiente, que no estamos interesados en formar parte de un mundo repleto de ese tipo de energías. Somos muchos l@s que queremos que sea nuestro trabajo lo único que hable por nosotr@s, y no la habilidad para socializar, ni nada que no tenga que ver con la labor que se lleva a cabo. El lado positivo para mí, es que, ciertamente, eramos muchos los que no conocíamos el verdadero pensamiento de algunos "profesionales" a los que admirábamos. Duele, pero sólo confirma lo que ya pensábamos. Hay gente dispuesta a todo con tal de proteger su espacio. Machos alfa que ladran cuando te acercas, y que están deseando tener carnaza para comentar en la pausa del café. Quizá son tan buenos en lo que hacen, porque en su cabeza tienen una película igual de grande que las que doblan a diario (o al menos, eso parece, escuchándoles o leyéndoles).
Para terminar, hace poco escuché una entrevista a un juez, en la que, hablando de su bajada de sueldo (de 5.000 a 4.000 euros), decía que su colectivo no había presentado ninguna queja al respecto, porque son conscientes de los tiempos en los que estamos y de lo mal que lo está pasando mucha gente, que ese sueldo es más que suficiente, y lo saben. Que eso lo piensen los jueces y no lo piensen los actores de doblaje, es impactante. No hablo de los contratados mileuristas a los que explotan hasta el agotamiento bucal, sino de lo que se embolsan varios miles al mes entre publis, cuñas, doblaje y videojuegos, y sin embargo mantienen un discurso de "sueldo estándar"... ¿Se imaginan a los técnicos, que muchos aguantan lo inaguantable cobrando 600 euros, haciendo huelga? El estudio no tardaba una semana en remplazarlos.
A la gente que está viviendo algo similar, quiero decirles que esta semana, he oído de tres personas distintas algo como "si no estás con ellos, olvídate de trabajar en doblaje". Pues leyendo vuestras cartas, viendo vuestra sensibilidad y vuestra realidad, creo que en el doblaje encontraréis cosas que no os gustan. Pero podéis vivir de la voz. Y os animo a ello, porque por mucho que os veten, os apunten en listas, os apunten el nombre u os hagan fotos, vuestro talento lo lleváis con vosotros. Vuestra voz y vuestra energía es aplicable a miles de cosas, y hay un sitio para cada persona (aunque puede que no en "primera línea"). La verdadera libertad, como estamos viendo, ahora está en Internet. Tanto para opinión, como para trabajo. Así que sólo queda que sigáis haciendo lo mismo de siempre: aceptar cualquier trabajo que os sea propuesto, luchad contra vosotros mismos para ser mejores cada día en todos los aspectos, e intentar trabajar sólo con quien confía en vosotros, con quien os da verdaderas oportunidades. En cuanto al dinero, los tiempos son los que son, y entiendo que sea mejor "poco" que "nada", mientras empiezas.
|